Durante su larga y brillante trayectoria James Brown fueron numerosas las mujeres que prestaron su voz al padrino en actuaciones en directo: Tammy Montgomery (Terrell), Sugar Pie DeSanto, Vicki Anderson, Yvonne Fair o Lynn Collins entre las más reconocidas. Ahora bien, ninguna disfrutó del privilegio de que el propio James editara y produjera un disco para ella, excepto el caso que hoy nos ocupa: Anna King.
Anna se inició como una cantante de gospel, pero su gran oportunidad llegó cuando su voz henchida de soulful sedujo a James tras una prueba a la búsqueda de un reemplazo a Tammi Terrell para sus espectáculos en directo, corría el año 1963. Firmó con el sello Smash y fue tal la seducción que éste se decidió a producir su primer -y único- disco Back To Soul un año después. El álbum contiene versiones en clave soul de distintos éxitos de blues y algunos temas originales que el propio James firmaría bajo diferentes seudónimos, además de un dúo con Bobby Byrd, "Baby Baby Baby", que obtuvo cierto eco comercial. A pesar de ser uno de los álbumes soul más destacados que una mujer grabó en la década de los sesenta, sólo un año más tarde su carrera artística finalizó abruptamente para dedicarse a partir de ese momento y hasta el día de su muerte (2002) únicamente a labores pastorales (sólo colaboró con el grupo coral gospel Brockington Choral Ensemble). Back To Soul es una oscura sesión de protosoul, con detalles de rnb y blues, con el soporte de su propia banda y el mismísimo James Brown sentado en el órgano... muy acorde con el mejor James de aquella época antes de su salto al funk. Aunque ella nos muestra una voz suficientemente valiente y poderosa, lo cierto es que este disco reeditado el año 2009 está especialmente indicado para los amantes del sonido del padrino.
0 comentarios :
Publicar un comentario