
Su sonido va más allá, ó mejor dicho más lejos, a unos orígenes donde artistas mayoritariamente negros transmitían con su voz y música los sentimientos más profundos y la energía más poderosa. A una etapa donde el SOUL en mayúsculas era un volcán en plena erupción y los artistas como Otis Redding, Sam Cook ó James Brown iban dejando senderos señalizados por donde fluían a raudales los sonidos y las energías que trataban de dar vida a un nuevo concepto, una forma de existencia más espiritual y de confirmación de lo auténtico.
Guitarras rítmicas, teclados al más puro estilo de los 60 y metales, vibrantes metales de saxos y trompetas a través de Ben Jaffe, Patriq Moody y Paul Jones, algunos de los componentes de su banda, The True Loves, banda que se forjó tocando en las esquinas de las calles y en clubs de música punk, y que liderados por Eli Reed (Eli Husok es su verdadero nombre) son parte importante del resultado final de este disco. Y por supuesto, la voz de este blanco, que creció escuchando los discos de soul que su padre, aficionado a la música negra, ponía en el "pick-up", mostrando su disconformidad con lo establecido, de hecho su mote "paperboy" le viene de la especial forma de llevar la gorra que pertenecía a su abuelo y que le da ese aire al estilo de los antiguos repartidores de periódicos en los EEUU.
Autodidacta, su primer disco lo saco cuando tenía 21 años de manera muy precaria y con muy pocos medios, pero su talento especial pronto consiguió que una discográfica mostrase su interés en sacar al mercado un disco con mejores medios y con la producción de Ed Valauskas, dando como resultado este disco, donde se mezclan canciones rítmicas que te recuerdan a James Brown, como "Doin'The Boom Boom" ó "The Satisfier" en las que los ritmos y sonidos explosivos se entremezclan con los gritos desgarrados de Eli, junto a baladas y a medios tiempos souleros como "I'll Roll With You" ó "It's Easier" del mejor estilo de Otis Redding ó Sam Cooke. No hay duda que nos encontramos con uno de esos pocos blancos con una garganta y alma del mismo color que aquellos artistas que hicieron las delicias en un tiempo ya pasado. Y no, no se trata de un imitador que trata de despuntar como sea para conseguir éxito y fama rápidos, su realidad es auténtica y es capaz de emocionarnos ó hacernos vibrar con su voz y un estilo que aunque pase el tiempo, siempre consiguirá llenar los recovecos de nuestros corazones.
2 comentarios :
Este disco es mi medicina para estas primeras mañanas de septiembre. Me tomo el café con Stake your claim y salgo de casa hecho un tiro.
Aunque nunca dejo comentarios, leo tu blog regularmente y me gusta mucho, claro.
Un saludo!
Es un placer conocer de tu existencia Lutxo, te invito a que sigas dejando comentarios y de esa forma conocer si otras recetas te han servido para estas mañanas cada vez más fresquitas.
Un saludo y gracias por estar ahí.
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