De nuevo nos encontramos frente a un artista que bebe de las fuentes de un soul sureño retro. Se trata de Marvin Sease, que aunque sus primeros trabajos discográficos se remontan a mediados de los años ochenta, sus inicios en la música se sitúan a finales de los sesenta, cuando apenas tenía veinte años.
Efectivamente, nacido en Carolina del Sur, la influencia de grandes mitos del momento como Al Green, Sam & Dave u Otis Redding fueron parte fundamental para que este hombre -que empezó cantando gospel con un grupo llamado "The five gospel singers"- encontrara su forma de dar rienda suelta a su energía interior a traves de un R&B cercano al Blues. Tras un peregrinaje por locales de baile y clubs underground, los circuitos rurales y festivales de blues consiguieron que la discográfica Polygram se fijara en él y expandiera su música, consiguiendo cierto éxito atrayendo público femenino a sus conciertos. A pesar de no tener el eco comercial de otros vocalistas coetáneos, Marvin Sease contribuyó a hacer resurgir el Blues en esta década de los ochenta. Con su sonido soul-blues o soul-sureño, temas como "Candy Licker", "Ghetto Man" pasaron a formar parte de las listas en las emisoras de radio blues de la época.
La publicación de su último disco titulado Who's Got The Power, a traves del sello discográfico Malaco -tambien culpable de ese resurgir del Blues en los ochenta-, nos presenta de nuevo a un Marvin Sease experto en el juego de las dobles intenciones, simbolismo y por que no decirlo, cierto toque extrafalario por su imagen, habitualmente rodeado de mujeres en las portadas de sus discos. Pero lo importante es el contenido, y en el interior del disco nos encontramos buena música soul que se balancea entre el blues y el funk. Temas lentos y rápidos van formando una tela de araña que te van atrapando y formando un álbum completo y acogedor. Asi podemos encontrar temas llenos de vitalidad y ritmo -muy al estilo funk de James Brown- como "Blues Town", "My Dog Won't Wark" o "The Power of Coochie", sonidos sureños provenientes de un soul profundo como "Gone On" -homenaje a los grandes vocalistas de la música desaparecidos- o "I'm Coming Home" donde introduce una conversación telefónica con su ex, altas dosis de sensualidad en "I Do Baby" hasta baladas muy al estilo Otis Redding en "Denying Our Love" y "I Love You".
Es cierto que no nos ofrece nada nuevo y original, que todo forma parte de unos sonidos y un estilo provenientes de años atrás, pero se agradece de alguna manera, que parte de la esencia de ese sonido que manifestaba las emociones y tristeza de unos hombres y mujeres desarraigados de su tierra para convertirse en esclavos, siga estando vivo hoy en dia y que el poder del blues-soul, canalizado a traves de este hombre, nos siga ofreciendo sentimientos y ritmos en forma de canciones.
Efectivamente, nacido en Carolina del Sur, la influencia de grandes mitos del momento como Al Green, Sam & Dave u Otis Redding fueron parte fundamental para que este hombre -que empezó cantando gospel con un grupo llamado "The five gospel singers"- encontrara su forma de dar rienda suelta a su energía interior a traves de un R&B cercano al Blues. Tras un peregrinaje por locales de baile y clubs underground, los circuitos rurales y festivales de blues consiguieron que la discográfica Polygram se fijara en él y expandiera su música, consiguiendo cierto éxito atrayendo público femenino a sus conciertos. A pesar de no tener el eco comercial de otros vocalistas coetáneos, Marvin Sease contribuyó a hacer resurgir el Blues en esta década de los ochenta. Con su sonido soul-blues o soul-sureño, temas como "Candy Licker", "Ghetto Man" pasaron a formar parte de las listas en las emisoras de radio blues de la época.
La publicación de su último disco titulado Who's Got The Power, a traves del sello discográfico Malaco -tambien culpable de ese resurgir del Blues en los ochenta-, nos presenta de nuevo a un Marvin Sease experto en el juego de las dobles intenciones, simbolismo y por que no decirlo, cierto toque extrafalario por su imagen, habitualmente rodeado de mujeres en las portadas de sus discos. Pero lo importante es el contenido, y en el interior del disco nos encontramos buena música soul que se balancea entre el blues y el funk. Temas lentos y rápidos van formando una tela de araña que te van atrapando y formando un álbum completo y acogedor. Asi podemos encontrar temas llenos de vitalidad y ritmo -muy al estilo funk de James Brown- como "Blues Town", "My Dog Won't Wark" o "The Power of Coochie", sonidos sureños provenientes de un soul profundo como "Gone On" -homenaje a los grandes vocalistas de la música desaparecidos- o "I'm Coming Home" donde introduce una conversación telefónica con su ex, altas dosis de sensualidad en "I Do Baby" hasta baladas muy al estilo Otis Redding en "Denying Our Love" y "I Love You".
Es cierto que no nos ofrece nada nuevo y original, que todo forma parte de unos sonidos y un estilo provenientes de años atrás, pero se agradece de alguna manera, que parte de la esencia de ese sonido que manifestaba las emociones y tristeza de unos hombres y mujeres desarraigados de su tierra para convertirse en esclavos, siga estando vivo hoy en dia y que el poder del blues-soul, canalizado a traves de este hombre, nos siga ofreciendo sentimientos y ritmos en forma de canciones.
2 comentarios :
Grandioso blog. Para mi es un gran descubrimiento.
Saludos
Gracias por tus palabras ll Cavaliere, lo mismo digo de "el signo de los tiempos", gran trabajo.
Un saludo y gracias por compartir tu tiempo y gustos por la música.
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