Es posible que no hayáis oído nunca a este vocalista, compositor y productor de New Orleans aunque haya estado vinculado a la música, de una u otra manera, desde hace dos décadas. Influido por artistas tan diversos como Stevie Wonder (su mayor referencia), James Taylor, Al Green, The Police o Prince, él mismo define su música como soulful pop. Pop en el buen sentido y soul clásico de los años sesenta y setenta, con evidentes influencias gospel.
Walk Alone es su quinto trabajo de estudio -editado por el sello independiente S.O.S.- un álbum concepto muy personal, en el que el artista desnuda su alma manifestando sus pensamientos más íntimos. Nos ofrece diez temas conmovedores escritos, producidos e interpretados por él mismo entre los que podemos destacar el primer single "The One" o el precioso tema "Mountains and Molehills" (que algunos aficionados piden que sea el próximo single). En su nuevo disco hay algunos cambios, como la introducción de teclados y cajas de ritmos que acaban con el minimalismo anterior que confiaba todo a la seducción de la melodía, descuidando un tanto la producción. No significa un abandono de su identidad sino simplemente una evolución natural. El título del álbum parece pretender simbolizar la soledad que siente este artista que ha eligido el camino del uso de la instrumentación en vivo (tanto en grabaciones como en directo) y la composición de canciones con criterio y significado, una rareza en los tiempos actuales. A pesar de presentar en su curriculum numerosos méritos: como estar posesión de un Grammy, de acumular los más prestigiosos premios de la música gospel (Dover, Stellar) o de haber compuesto canciones para artistas como India.Arie o superestrellas de la música gospel (Fred Hammond, Mary Mary) no tiene la consideración que realmente merece.
Yo le tengo en gran estima como artista, porque es un músico de verdad, tiene un sonido distintivo, único - en realidad difícil de encuadrar en una categoría concreta- y una gran habilidad para contar historias sobre la vida y el amor a través de su música. Sin límites creativos, detrás de su espiritualidad y humildad como persona se encuentra mucho trabajo y un ser capaz de regalarnos buena música. Si le das una oportunidad puede que no siga caminando solo por mucho tiempo y, aunque éste no sea su mejor disco, yo ya me he calzado las botas pues el camino se prevee largo. No hay vuelta atrás.
Walk Alone es su quinto trabajo de estudio -editado por el sello independiente S.O.S.- un álbum concepto muy personal, en el que el artista desnuda su alma manifestando sus pensamientos más íntimos. Nos ofrece diez temas conmovedores escritos, producidos e interpretados por él mismo entre los que podemos destacar el primer single "The One" o el precioso tema "Mountains and Molehills" (que algunos aficionados piden que sea el próximo single). En su nuevo disco hay algunos cambios, como la introducción de teclados y cajas de ritmos que acaban con el minimalismo anterior que confiaba todo a la seducción de la melodía, descuidando un tanto la producción. No significa un abandono de su identidad sino simplemente una evolución natural. El título del álbum parece pretender simbolizar la soledad que siente este artista que ha eligido el camino del uso de la instrumentación en vivo (tanto en grabaciones como en directo) y la composición de canciones con criterio y significado, una rareza en los tiempos actuales. A pesar de presentar en su curriculum numerosos méritos: como estar posesión de un Grammy, de acumular los más prestigiosos premios de la música gospel (Dover, Stellar) o de haber compuesto canciones para artistas como India.Arie o superestrellas de la música gospel (Fred Hammond, Mary Mary) no tiene la consideración que realmente merece.
Yo le tengo en gran estima como artista, porque es un músico de verdad, tiene un sonido distintivo, único - en realidad difícil de encuadrar en una categoría concreta- y una gran habilidad para contar historias sobre la vida y el amor a través de su música. Sin límites creativos, detrás de su espiritualidad y humildad como persona se encuentra mucho trabajo y un ser capaz de regalarnos buena música. Si le das una oportunidad puede que no siga caminando solo por mucho tiempo y, aunque éste no sea su mejor disco, yo ya me he calzado las botas pues el camino se prevee largo. No hay vuelta atrás.
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