Aretha Franklin - The Great American Songbook (2011)

¿Por qué tarda tanto tiempo Aretha en editar nuevo material? Sus fans esperan ansiosos cada nuevo disco, aunque ciertamente  la indiscutible reina del soul haya exhibido una trayectoria muy irregular en los últimos 30 años. Además, con frecuencia editaba un nuevo trabajo una vez que todos habían olvidado lo que en su día se anunció se iba a publicar. Esto mismo parecía estar sucediendo con A Woman Falling Out of Love, cuya edición final ha sido programada, retrasada y cancelada en numerosas ocasiones en los tres últimos años.

Sin embargo, lamentablemente en esta ocasión hay una razón de peso: Aretha se prepara para luchar por su vida. Diagnosticada y operada de un cáncer de páncreas a finales del año pasado ha cancelado cualquier actividad profesional hasta mediados de este año cuando se espera esté suficientemente recuperada. No obstante, para hacer la espera más corta (o aprovechar de manera repugnante el morbo para hacer caja) Legacy Records ha puesto a la venta The Great American Songbook, conmemorando 50 años de la firma de la diva por este sello discográfico.

Un recopilatorio de 18 canciones que nos brinda un excelente panorama de los comienzos de la cantante a principios de la década de los sesenta, cuando grababa en los estudios de Columbia antes de que se convirtiera en una diva. Su éxito comercial llegaría un poco más tarde ya de la mano de Atlantic Records y Jerry Wexler, aún no había florecido plenamente pero ya se puede apreciar esa maravillosa voz que hundía su raíces en el gospel empapada de soul. John Hammond la firmó para Columbia más como intérprete de baladas jazzy y de standars pop donde el arrollador talento vocal quedaba relegado a un segundo plano en favor de la moderación y el matiz. Con estas canciones de los compositores más grandes, Aretha allanó el camino hacia su propia grandeza. Ya sea pop, bebop, gospel o blues, su voz es tan grande que cualquier material que caía en sus manos lo transformaba en algo especial. Estas grabaciones son instantáneas indelebles de un momento especial en la carrera de una leyenda musical que revelan a una artista emergente en el umbral de su punto óptimo.

Leon Ware - Sumthin' Sumthin' (Live in Amsterdam, 2001)

Leon Ware es por derecho propio una de las figuras más importantes de la música negra en los últimos 35 años y una de mis confesadas debilidades. No voy aburriros con su vasto curriculum musical, pero dejarme recordaros que este fabricante de sueños y sensaciones ha trabajado durante cuatro décadas en una lista interminable e impresionante de grabaciones clásicas con artistas de la talla de Quincy Jones, Minnie Riperton, Michael Jackson, Maxwell, Average White Band y, por supuesto, firmó álbum seminal de la Motown, I Want You, junto al inolvidable Marvin Gaye.

Menos valorada resulta su faceta como intérprete, pero quien ha podido disfrutar de sus actuaciones en directo conoce del enorme talento de este artista, de la maravilla que supone degustar cada una de sus notas insufladas del espíritu del soul. En el año 2001 grabó un especial maravilloso para la televisión pública holandesa en el Paradiso Venue de Amsterdam acompañado por la DOX Orchestra y junto a la vocalista Carleen Anderson (Brand New Heavies) y Michael Franti (Spearhead). El propio Leon se ocupó de los nuevos arreglos para esta selección de obras maestras de su propia cosecha que muestran la quinta esencia del soul orgánico... no tengo palabras para describir tanta belleza, tantas emociones, así que mejor dejamos que la música se exprese por sí misma con la versión de este clásico que escribiera él mismo para Maxwell en su álbum de debut Urban Hang Suite (1996).

Paul Carrack - I Know That Name (2008)

Cuando uno compra un disco o asiste a un concierto de este artista de pop/rock con alma de soul (blue-eyed soul) uno siempre siente esa familiaridad, ese sonido tan suave y cómodo como un traje muy ajado. Excepto la cuestionable versión reggae de su éxito "Eyes Of Blue", en su duodécimo disco la música se desliza como siempre elegante, cómoda y conmovedora por nuestros oídos, nunca demasiado caliente ni demasiado fría y es que su propuesta no entiende de extremos.

Música adulta en definitiva integrada por canciones a medio tiempo salpicada de nuevas grabaciones de los éxitos que en su día escribió para otros artistas, esa ha sido su apuesta en los últimos 20 años. Aunque este talentoso vocalista/teclista ha obtenido éxitos considerables a lo largo de su extensa carrera artística, éstos los obtuvo al servicio de las bandas a las que perteneció (Ace, Squeeze o Mike + the Mechanics) o componiendo temas para otros intérpretes, todo ello a expensas de su propia identidad como artista. Para colmo de males en ocasiones se le confundía con Phil Collins... No importa, aunque tuvo que reinventarse en la década de los noventa, aunque lleva más de 20 años con un perfil bajo sin firmar un gran éxito, él es ese tipo de artista de la vieja escuela que nunca necesitó un gran presupuesto o un vídeo llamativo para firmar buena música. Una pena y una gran injusticia para este gran desconocido especialmente entre los amantes del pop/soul en Estados Unidos.

Dessy Di Lauro - Jump n’ Jivin’ (2011)

Dessy Di Lauro es sin duda una artista diferente, original y distinta a las demás. Podrá gustar más o menos al público su indie soul pero merece nos detengamos siquiera un momento para conocer la propuesta musical de esta canadiense con sede artística en Los Angeles. A principios de este mes ha editado un nuevo EP de cinco temas grabados en vivo el pasado mes de abril durante una actuación en The Swing House (Hollywood) acompañada por una completa sección rítmica y de viento y en el que, cómo no, se incluye el tema "Why U Raggin'?", galardonada como una de las mejores canciones rnb del pasado año.

Su personalidad musical se forjó durante su infancia cuando cada elemento de su entorno familiar fue asimilado e integrado de manera soprendente (jazz, ritmos latinos) para completarse finalmente con elementos gospel, rap, rnb y acidjazz durante su periodo de formación alternando íntimas actuaciones en pequeños locales con espectaculares interpretaciones suspendida en el aire en el famoso Cirque du Soleil. Allí conoció a Ric'key Pageot (teclados, compositor y productor) con quien le une una química musical especial fruto de la cual nace esta fusión inteligente de swing, jazz , rnb y funk con ese tono de voz jazzy/clásica de esta original artista. Os dejo con el tema "Shout Out" incluido en el EP de debut Study of a Woman's Soul (2004).

Mama's Gun - Pots Of Gold (2009)

Éste es el tipo de disco que con aire de suficiencia podías recomendar a tus amigos aquel año del 2009 para mantener impoluta esa credibilidad que atesoras como gran conocedor de la música. Routes To Riches fue el título escogido para el álbum de debut de este grupo británico que apuesta por un estilo funky/pop desenfadado de última generación pero con aires nostálgicos, con ese guiño comercial que el título del álbum apenas si puede refutar. Ahora bien, como ya han demostrado en la década de los noventa The Brand New Heavies, Jamiroquai o Incognito no hay nada malo en fusionar música funky con el pop siempre y cuando se sepa lo que se está haciendo...

Es un poco injusto etiquetar tan fácilmente a la banda de esta manera tan simple porque está claro que sus influencias musicales provienen de muy diversos orígenes y que no tienen miedo de mostrarlas, fusionando estilos más como homenaje que como burda copia. Así, por momentos se asoma Jay Kay en la estupenda voz tenor elástica del vocalista y principal compositor Andy Platts que da al grupo su identidad primaria. En ocasiones la guitarra y percusión son impulsados con la urgencia rítmica de funk Stax e, incluso algunos arreglos de cuerda comparten la misma ambición y la grandeza del Philly Soul de los setenta, pero hay mucho más. También nos recuerdan al rock progresivo de Elton John, Supertramp o al soul/funk de Prince, Sly & The Family Stone, Stevie Wonder... Un logro notable de efectista fusión de estilos en la producción, organización y ejecución del disco.

The Birmingham Sound: The Soul of Neal Hemphill

"Cuenta la historia que Howard Carter, concienzudo egiptólogo británico, halló la tumba de Tutankamon por casualidad. [...] La historia de nuestro protagonista recuerda a la del viejo Carter. Porque John Ciba, un Dj profesional de Chicago, tiene mucho de Carter y, como él, ha incluido un nuevo fascículo para el conocimiento humano, gracias a su envidiable curiosidad y su amor innato por la música.

Tal egiptólogo de raza, Ciba se ha adentrado en una aventura de otra época y ha llevado a cabo un trabajo fantástico de arqueología, en este caso, en otra tierra divina, la de los faraones del soul, en la misma Alabama, donde las canciones sustituyen a los jeroglíficos para que los mortales puedan alcanzar la eternidad. Su labor es, para ser exactos, un completo ejercicio de resurrección. Los volúmenes The Birmingham Sound: The Soul of Neal Hemphill, las dos joyas de la corona del trabajo de Ciba, son tan importantes para los amantes de la música negra como las últimas tumbas descubiertas en el Valle de los Reyes para los egiptólogos. Música de raíces procedente de las profundidades de la vieja Alabama, que ha dado pie a la creación de un nuevo sello independiente llamado Rabbit Factory y al renacer de leyendas locales como Roscoe Robinson o Ralph Soul Jackson, momias desconocidas para la anquilosada industria discográfica, pero auténticos reyes sin corona de los sonidos del sur para los oyentes exigentes y de paladar fino.[...] En las páginas de la revista Ruta 66, hay más información de todo esto. [...] Si tienes Spotify, puedes escuchar el volumen 1 (2006) y el volumen 2 (2008) de The Birmingham Sound: The Soul of Neal Hemphill. Si eres amante de la música de raíces afroamericana, te aconsejo que dediques una tarde o una mañana a escuchar con calma y atención ese circo sonoro, repleto de trapecistas, domadores y hombres bala de la soul music. Auténtica vida y magia en esos recopilatorios. [...] Todavía, muchos años después, hay motivos para creer en la música como fuente de inspiración, como motor vital, como viaje en el tiempo. La música, a fin de cuentas, como una aventura para el oyente. Tal vez, por qué no, la aventura jamás vivida".

Autor: fernando-navarro
Título del artículo: El sonido de Birmingham, en busca del soul perdido
http://lacomunidad.elpais.com/ruta-norteamericana/posts

Lira - Feel Good (2006)

Resulta difícil no escuchar esta canción incluída en el álbum homónimo de debut de esta joven sudafricana y no sentirse bien. Lira Molapo tiene una voz suave, con un verdadero talento musical (escribió o co-escribió todos los temas del álbum) y un atractivo físico que en su conjunto la convierten en una abanderada del nuevo afro-soul, en un producto eminentemente comercial...

Un disco que se puede definir por su honestidad, la emotividad, la feminidad y la alegría total que transmite a quien lo escucha. Un álbum hecho a mano, que se pliega en el corazón de los oyentes, que ofrece la calidez y el confort de una persona que instintivamente sabe cómo comunicar la cosas de la vida de una manera que al instante resuena en tu corazón. Con sólo 15 años de edad entró en el escenario por primera vez después de ganar un concurso de talentos, hoy es ya una mujer en la frontera de la treintena que ha madurado artísticamente pero que ya en sus comienzos arrastraba por la pasión, intensidad y alegría con la que vive la música, tal y como lo demuestra en sus fantásticas actuaciones en directo.

Jo Stance - Jo Stance (2010)

Curiosa propuesta la que nos llega desde Finlandia, sí si habéis leído bien, y no estoy hablando de un viejo conocido de este espacio como Tuomo. La era de la globalización permite que podamos acceder a trabajos que de otro modo no hubieran tenido una trascendencia más allá de lo puramente local. Este disco de presentación de la artista es un proyecto independiente liderado por el dúo Stance Brothers (Försti y Mäkynen) grabado en su estudio casero con un multipistas analógico, siendo responsables de todos los créditos del álbum excepto cierta ayuda en la sección de metales por parte de Jukka Eskola y Timo Lassy.

La apuesta es clara, en los últimos años hemos asistido a un resurgimiento del sonido y estilo retro-soul de los sesenta con resultados muy variados en cuanto a la captación del sonido y la calidad de las canciones. En este caso, apuestan por melodías relajadas convenientemente apoyadas en el sonido del vibráfono -su toque original- y en la voz de Johanna Försti (su verdadero nombre). Ella, que ha sido un pilar en la escena del jazz finlandés durante algún tiempo, nos demuestra que frente a la cautela habitual de los cantantes nórdicos -como si se estuvieran excusando ante el oyente por estar delante de un micrófono- pone todo el corazón en cada interpretación, algo por otra parte imprescindible para atreverse con el género soul.

John Stoddart - Faith Hope Love (2010)

John Stoddart reclamó la atención de los amantes del soul cuando le escucharon aportar su interpretación vocal al tema "Isn't She Lovely" -el clásico de Stevie Wonder- incluído en el álbum smooth jazz the Golden Slumber's: A Father's Lullaby (2002). Desde entonces su voz cristalina, sus actuaciones en directo, su capacidad para "bailar el micrófono" y ese soul espiritual ha ido ganando seguidores año tras año, y es que resulta difícil escucharle y no quedarse atrapado en sus redes.

No es pues un recién llegado a la escena, nada más lejos de la realidad. Este nativo de Filadelfia, es uno de los talentos más notables de la industria de la música de los últimos 20 años. Un artista consumado, compositor, escritor, compositor e instrumentista que ha trabajado para artistas como Al Jarreau, Bob james, Will Downing, Kirk Whalum, Michael McDonald o Patti Austin entre muchos otros, pero que también ha desarrollado su carrera musical en solitario. El año pasado el sello discográfico de su propiedad Urban Junction East editó Faith Hope Love,  un disco continuista con los anteriores que apuesta por esa atractiva mezcla de soul, jazz y pop. Una colección de conmovedoras canciones de amor que,como si de una sesión de terapia de pareja fuera, nos cuentan los retos y triunfos de cualquier matrimonio desde el punto de vista espiritual de un hombre de profundas conviciones religiosas. En definitiva, un álbum soul orgánico de calidad de principio a fin muy recomendable.

Ann Peebles - I Feel Like Breaking Up Somebody's Home (1972)

Una diminuta cantante con una voz potente, Ann Peebles fue una de las artistas que escribieron de la mano del productor Willie Mitchell la etapa de mayor gloria del sello de Memphis Hi Records. Una de las mejores cantantes de southern soul de la década de los setenta, sus temas compuestos junto a su esposo Don Bryant escribieron la historia musical de aquella época, comenzando por "I Can't Stand the Rain" (1973) un clásico por derecho propio versioneado hasta la saciedad.

Desarrolló una larga y exitosa carrera sólo eclipsada dentro de su propio sello por Al Green. La década de los setenta la vió llegar en numerosas ocasiones al top en las lista de ventas: la citada "I Can't Stand the Rain", "Part Time Love", "I Pity the Fool" o este "I Feel Like Breaking Up Somebody's Home" entre otros clásicos que hoy recordamos. Difícil resistirse a un amante del southern soul como yo ante el maravilloso sonido que componen esas guitarras blues/funky en la sección rítmica, la garra de la sección de metales y esa convincente voz, serena y sensual que muerde la melodía nota a nota y que canta con el corazón en la mano.

Aaron Neville - I Know I've Been Changed (2010)

Quizás exagere y sólo sea un apreciación personal, quizás el artista interprete con esa dulzura y emoción características estos temas simplemente porque son grandes canciones y él es una gran cantante. Al fin de al cabo, el productor del disco Joe Henry ha intervenido directamente en la selección de estos temas tradicionales -casi reliquias del folklore-, canciones que fueron escritas para ser cantadas y compartidas por la comunidad y para la posteridad. Pero esa convicción, esa simplicidad, ese apasionamiento o el uso de la primera persona con la que interpreta parecen auténticas, convincentes sin que parezca que haya nada conceptual detrás de lo que esconderse.

El disco fue grabado con un cuarteto de gospel en sólo tres días por lo que la improvisación y la inspiración resultan determinantes en el resultado final. Ése es el método que gusta al productor, reunir un grupo de gente con talento en una habitación y no dejarlos salir hasta que hayan terminado de manera adecuada su trabajo, no puede fallar... Este álbum, en particular, se ha beneficiado de este enfoque que recuerda otros trabajos anteriores de Joe, en especial el minimalismo y el ritmo en Don't Give Up on Me (Solomon Burke) o las entonaciones bluesy en el álbum que hizo con Mary Gauthier. En especial destaca la figura del legendario pianista Allen Toussaint, viejo amigo de Aaron, cuyo formidable talento por sí sólo justificaría la escucha del disco y que empapa al trabajo de todo el espíritu festivo, enérgico y auténtico de las pequeñas iglesias Baptistas de los Estados Unidos. En general el trabajo de los músicos es más que notable, columpiándonos de manera alegre y contagiosa cuando los instrumentos no suenan como simple acompañamiento sino como otro miembro adicional del coro.

En definitiva nos propone una música hecha para cantar, canciones que tratan sobre la redención personal, la salvación, la vivienda, la liberación, esperanza, y se presentan como tales -como testimonio de algo real y e irrevocable. Experiencia espiritual, integridad personal y conciencia histórica se unen de la mano, música que mira al cielo pero con los pies en la tierra. Con ese ritmo de acompañamiento fácil y relajado semejante a una jam session improvisada en el sótano de una iglesia, con su vibrato inconfundible que apenas si ha cambiado desde aquel lejano Tell It Like It Is (1966) éste es un disco indicado para los entusiastas de gospel tradicional, así como los fans del blues, el folk, el soul y en general la música de raíces.