Remy Shand is back? Las redes sociales se hacían eco el año pasado del hecho de que el artista canadiense volvía a dar señales de vida tras una década de perturbadora desaparición: en efecto, utilizó la plataforma Youtube para subir temas nuevos... parecían confirmarse las mejores expectativas. No estaba claro en ese momento si aquellas canciones iban a representar un regreso en toda regla o volvería a entrar en hibernación durante otra década más. Ha transcurrido un año desde entonces y, de nuevo, un inquietante silencio se ha adueñado de las fustradas esperanzas de sus incondicionales fans. Parece que haya vuelto a desaparecer del mapa...
Aún extraña más su prolongada ausencia (retirada) si tenemos en cuenta que su disco de debut fue recibido con entusiasmo por crítica (4 nominaciones a los grammy) y público (fue disco de oro en Estados Unidos y platino en su país de origen). Con solo un trabajo editado, Remy se mantiene todavía como todo un referente para la música blue-eyed soul (neosoul). Y es aunque fuera su primer álbum demostraba una madurez impropia, fue uno de los mejores trabajos editados aquel año. Junto a Justin Timerlake o Robin Thicke, estaba en condiciones de poder liderar el resurgimiento de este estilo musical a principios del nuevo milenio. ¿Un tipo joven, blanco, de clase media, canadiense, multiinstrumentista que firmaba todos los temas, demostraba tener verdadero talento y parecía estar poseído por el espíritu del viejo soul de los setenta, con evidentes influencias de Maxwell, Jamiroquai, Marvin Gaye, Al Green, Stevie Wonder o D'Angelo?,toda una sorpresa. Él mismo, fue quien en su propio domicilio de Winnipeg, escribió, produjo, mezcló y tocó todos los instrumentos, algo sólo al alcance de los genios. La razón del éxito la podemos encontrar en esa mezcla de talento y pasión, el artista puso en el disco todo su corazón y alma en cada uno de los diez temas del disco y eso se nota. Aunque no sea el mejor cantante del mundo, ese emocionante falsetto te atrapa irremediablemente desde la primera nota para ofrecernos un más que notable conglomerado de soul, pop, rnb, rock o jazz en un álbum verdaderamente versátil. Canciones que rezuman dulces melodías engañosamente simples en su estructura, pero que revelan toda su fuerza con cada nueva escucha. Te seguimos esperando...
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