Con demasiasa frecuencia la edición de discos recopilatorios está vista con desdén, con una calculada distancia por cierto público que los consideran como un subgénero orientado hacia aquellas personas que busca adentrarse en el conocimiento de determinados géneros o estilos de música de manera rápida, cómoda y superficial.
Más allá de lo que piense cada cual y de polémicas estériles, lo cierto es que determinados sellos realizan una labor impagable para todos nosotros rescatando viejos tesoros ocultos que salen a la luz para disfrute general. En este sentido, Secret Stash Records, un sello independiente con sede en Minneapolis desenterró hace dos años un total de 21 canciones de los años sesenta y setenta, pero absolutamente atemporales, resucitando temas e intérpretes olvidados para la historia de la música bajo el esclarecedor subtítulo de "Lost R&B Grooves From Minneapolis/St. Paul 1964-1979". Artistas y grupos, la mayoría totalmente desconocidos, con más o menos talento, una obra de amor al fin que da vida y rinde tributo a un periodo de la historia musical de las dos ciudades gemelas norteñas de Estados Unidos en las que estos grupos de soul palpitaban en sus clubes nocturnos.
Cuando pensamos en el sonido Minneapolis inmediatamente lo identificamos más con la década de los ochenta y figuras icónicas como Prince, Jimmy Jam y Terry Lewis o Morris Day & The Time. Sin embargo, toda esa oleada de energía creativa de aquella generación no apareció de repente, sin previo aviso. Esta es la historia de la generación anterior, de estos héroes locales quienes durante años llenaron con su música las ondas de radio y las estanterías de las tiendas de discos. No se puede negar que el sello ha hecho una gran labor de investigación, incluyendo un completo libreto de 32 páginas con información biográfica sobre los artistas, notas de prensa y un montón de fotos inéditas de la época. Se puede considerar como un documento de gran valor histórico y cultural, pero lo verdaderamente importante es todo ese soul/funk/rnb vintage que estas canciones contienen, representan y es que algunas de ellas perfectamente podrían conformar la banda sonora de la próxima película blaxploitation de Quentin Tarantino.
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