Después de más de cinco décadas en el negocio musical, este legendario artista -arquitecto del mítico sonido Stax (el soul de Memphis)- sabe lo que quiere y cómo conseguirlo, creando bases rítmicas sólidas como plataforma donde desarrollar sus excelsas habilidades delante de un órgano Hammond B-3 que parece cantar, ronronear, gemir y gritar con una expresividad casi humana.
En efecto, en su cuarto álbum en solitario extiende sus alas para cobijar a productores y músicos de categoría como Gabe Roth (Daptone Records), Sharon Jones, Dennis Coffey o Questlove (The Roots), para recuperar, actualizado, aquel sonido sincopado característico del sello Stax. Se escucha como el trabajo de un grupo que haya pasado años juntos, en lugar de un líder y una banda de respaldo, aunque ciertamente la verdadera estrella sean las prodigiosas manos de Booker a los teclados. Once temas en total (sólo cuatro vocales) con una base rítmica espectacular e imbuidos del viejo soul/funk sólido y profundo, con incursiones en el blues, el rock o en el hip hop, divertido y por momentos maravilloso. Talento, trabajo duro, pasión por la música y creatividad son las razones por las que se mantiene a flote después de tanto tiempo. Es imposible exagerar el alcance de la influencia que para la música ha tenido ese alquimista del soul, por algo será que al final parece que todos los caminos conducen a Memphis.
2 comentarios :
Y el día 1 estará en Barcelona!! Oh, yeahhhh!
Y el dia 1 una que yo me se asistirá a la actuación, jajaja. Saludos
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